El sector minorista tiene un gran potencial de valor digital, y el comercio electrónico no es una excepción. Con la ayuda de los gobiernos, las tecnologías de la información han hecho posible que el comercio electrónico sea una realidad. Los servicios de soporte al comercio electrónico pueden ser proporcionados por proveedores de servicios de Internet, o incluso por grandes empresas que pueden ofrecer capacidades avanzadas de comercio electrónico valoradas en millones de dólares. Es importante recordar que el comercio electrónico no se limita solo a Internet, sino que puede tener diferentes efectos en las industrias de producción de bienes.
La seguridad es una preocupación importante cuando se trata del comercio electrónico, y los recursos deben asignarse para cumplir los objetivos. El comercio electrónico B2E se centra en las ventas exclusivas para los empleados de la empresa, mientras que el comercio electrónico B2C depende de la comodidad de los clientes. Los minoristas deben prestar atención a los tiempos de carga, ya que los milisegundos pueden costarles millones. Para garantizar transacciones seguras, los minoristas deben utilizar un servidor seguro que encripte la información confidencial.
Monitorear el acceso de los usuarios al sitio de comercio electrónico puede ayudar a determinar estrategias para atraer más visitantes. Esto incluye mejoras de SEO y la creación de referencias web a través de backlinks. Además, se pueden utilizar innovaciones como la transferencia electrónica de fondos, la gestión de la cadena de suministro, el marketing en Internet, el procesamiento de transacciones en línea (OLTP), el intercambio electrónico de datos (EDI), los sistemas de gestión de inventario y los sistemas automatizados de recopilación de datos para aumentar la eficiencia y la productividad.